Entre curva y contracurva, desierto, montaña y lago, los días se me pasan entre las piernas y este blog se empieza a quedar más atrás de donde me acordaba.
La última imágen que tengo fue en el aeropuerto mientras llorisqueaba y un colombiano me ofrecía carilinas. Y ahora? Ahora.. todo salió como una amiga me decía, Delfi, "en una semana te vas a cagar de risa de lo que estás llorando". Ojo! Sigo con la cabeza medio tambaleando, entre el allá y el acá, que ya no se donde es.
El sol ya pegó fuerte y cuando me río las patas de gallo tiran fuerte. Bienvenida piel a los 3.800 mts de altura.
Yo soy de las que hacen muchas preguntas y en el mientrastanto se va imaginando la historia. Y si me falta algún datito te freno para sacarte la info que me falta para armar mi rompecabezas. Si, a veces pregustas estúpidas. Me conocen.
Resulta que.. desde hace años, escuchando y viendo muchas fotos por ahí no había podido armarme en la cabeza estos increíbles cuatro días que me llevaron conocer Aguas Calientes y la ciudad inka Machu Picchu. (¡mucho mejor!)
Aquí algunas imágenes para tentar a los que aún no tuvieron el agrado. Vengansennnnn para el Perú!
La caminata por la riel hasta aguas calientes. Un poco cansador pero con un clima y una vista que acompaña
6:30 hs estabamos arriba. Fue mucho peor de lo que pensabamos la subida. Entendimos porqué querían cobrarnos U$S 18 por 15 min en bus. Desayuno y siesta con esa vista.
No soy buena fotógrafa. Las llamas están sumamente domesticadas, posan y todo para la foto.
Merienda feliz después de un día increible. Nos quedamos hasta el cierre. Mucho más tranqui. Por lo general a las 14:00 hs ya no queda mucha gente.
Cusco fue diseñado con forma de puma. Machu Picchu en forma de Condor
Putucusi, es una montaña frente a la ciudad inka. Se puede subir gratis. Lo hicimos al día siguiente y con lluvia! Necesitamos rodillas y piernas nuevas.
